En el Día Mundial de la Ortóptica, hacemos hincapié en la importancia de una evaluación periódica de la visión en todas las etapas de la vida. La ortóptica es un campo especializado dedicado al análisis funcional de la visión, con especial atención a la motricidad ocular, la visión binocular y la rehabilitación de determinadas disfunciones visuales.

Muchas alteraciones visuales, como el estrabismo, la ambliopía (ojo vago) o las dificultades de coordinación entre los ojos, pueden desarrollarse silenciosamente y pasar desapercibidas en la vida cotidiana. La intervención precoz, basada en una cuidadosa evaluación funcional, es fundamental para identificar estas situaciones y realizar las derivaciones oportunas cuando sea necesario.

Incluso los trastornos visuales más graves, como el glaucoma o la retinopatía diabética, pueden no mostrar síntomas en las primeras fases. Aunque estas situaciones son de competencia médica, la observación periódica por parte de profesionales de la visión puede contribuir a una detección más precoz y facilitar la derivación para un seguimiento clínico adecuado.

Realizar evaluaciones visuales periódicas, incluso en ausencia de quejas, es una forma eficaz de preservar el confort visual y el equilibrio, sobre todo en edades más avanzadas, como la infancia.

En este Día Mundial de la Ortóptica, reforzamos la importancia de la prevención y la cooperación entre los distintos profesionales de la visión. Cuidar la vista es cuidar la calidad de vida, porque ver bien es, sin duda, vivir mejor.